¿Qué es Make y cómo funciona?

¿Qué es Make (antes Integromat) y cómo funciona esta potente herramienta de automatización?

¿Qué es Make (antes Integromat) y cómo funciona esta potente herramienta de automatización?



Vivimos en una era donde la eficiencia es clave. Cada minuto que dedicamos a tareas repetitivas es un minuto que podríamos usar para crear, innovar o simplemente descansar. Aquí es donde entra Make, antes conocido como Integromat, una plataforma que está revolucionando la forma en que trabajamos con herramientas digitales.

Pero… ¿qué es exactamente Make? ¿Cómo funciona? ¿Y por qué cada vez más empresas, freelancers y creadores digitales lo están adoptando?

Make: Automatización sin código al siguiente nivel

Make es una plataforma visual que permite automatizar tareas entre diferentes aplicaciones y servicios sin necesidad de escribir una sola línea de código. Es lo que se conoce como una herramienta no-code, diseñada para que cualquier persona —sin ser programador— pueda construir flujos de trabajo inteligentes y automáticos.

A diferencia de otros sistemas de automatización más simples, Make permite crear escenarios complejos, con condiciones, ciclos, filtros y ramas que te dan un control casi total sobre cómo y cuándo se ejecutan las tareas.

¿Cómo funciona Make?

La lógica de Make se basa en tres pilares:

  • Disparadores (Triggers): un evento que inicia el flujo. Por ejemplo, "cuando recibo un nuevo correo en Gmail" o "cuando alguien completa un formulario en Typeform".
  • Acciones (Actions): las tareas que quieres que ocurran en respuesta. Por ejemplo, "añadir los datos a una hoja de cálculo en Google Sheets" o "enviar una notificación por Slack".
  • Operadores Lógicos: puedes añadir filtros, condiciones, bucles (repeticiones), rutas alternativas y transformaciones de datos para que tu automatización se comporte como tú quieras.

Todo esto se diseña en un entorno gráfico de tipo "arrastrar y soltar", lo cual lo hace muy visual e intuitivo, incluso para quienes no tienen experiencia técnica.

¿Qué se puede hacer con Make?

La lista de posibilidades es enorme. Aquí algunos ejemplos reales:

  • Cuando alguien llena tu formulario de contacto, se crea una tarea automáticamente en tu gestor de proyectos y se le responde por correo.
  • Automatizar reportes semanales de ventas y enviarlos por email en PDF.
  • Subir automáticamente a redes sociales las imágenes que agregues a una carpeta de Dropbox.
  • Crear facturas automáticas cuando se realiza un pago en Stripe o PayPal.
  • Sincronizar tus contactos entre Google Contacts, Notion y tu CRM.

Literalmente puedes conectar cientos de apps: Gmail, Google Drive, Notion, Airtable, WhatsApp, Discord, Facebook Ads, Shopify, WooCommerce, Telegram, y muchas más.

¿Cuánto cuesta Make?

Uno de los puntos fuertes de Make es que ofrece un plan gratuito bastante generoso:

  • Free: Hasta 1,000 operaciones al mes y 100MB de transferencia de datos. Ideal para comenzar o pequeños proyectos personales.
  • Core: Desde $9/mes con más operaciones, velocidad de ejecución más rápida y soporte básico.
  • Pro y Teams: Para empresas, agencias y profesionales que necesitan rendimiento superior, ejecución instantánea, y colaboración en equipo.

Puedes ver los precios actualizados en su sitio oficial.

¿Qué lo hace diferente de Zapier u otras plataformas?

Aunque Zapier es el competidor más conocido, Make tiene varias ventajas que lo hacen destacar:

  • Interfaz visual con conexiones entre módulos (tipo diagrama de flujo).
  • Puedes repetir operaciones (loops), algo que Zapier no permite fácilmente.
  • Más económico por operación.
  • Posibilidad de trabajar con datos de forma avanzada (funciones, transformación de texto, formato de fechas, condicionales, etc.).

Para usuarios avanzados o aquellos que quieren automatizar procesos complejos sin pagar precios altos, Make suele ser la mejor opción.

¿Hay riesgos o malos usos posibles?

Como toda tecnología poderosa, Make puede ser usada para fines poco éticos:

  • Automatizar spam en redes sociales o correos.
  • Realizar scraping masivo de sitios web sin permiso.
  • Usar automatizaciones para manipular sistemas o violar términos de servicio de apps.

Por eso es fundamental usarlo de forma ética y responsable. Automatizar tareas está bien, pero siempre respetando la privacidad, la legalidad y la experiencia de los demás usuarios.

¿Quién debería usar Make?

  • Emprendedores digitales que quieren escalar sin contratar más personal.
  • Freelancers que necesitan ahorrar tiempo y trabajar con múltiples clientes.
  • Equipos de marketing que deben coordinar publicaciones, correos, analítica y más.
  • Desarrolladores no-técnicos que buscan soluciones sin tener que programar.
  • Educadores, creadores de contenido, ecommerce y agencias que manejan muchas plataformas.

Conclusión: ¿Vale la pena Make?

Definitivamente sí. Make no solo te ahorra tiempo, sino que te devuelve el control sobre tus herramientas digitales. Te permite enfocarte en lo importante mientras se encargan automáticamente de lo repetitivo.

Y lo mejor de todo: puedes empezar gratis, probar, crear, experimentar… y solo escalar cuando lo necesites.

¿Quieres ideas de cómo automatizar con Make? En próximos artículos te daremos plantillas listas para usar. ¡Suscríbete para no perdértelo!

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